Estilo de vida

Releer un libro puede tener beneficios para la mente y el corazón

La relectura de un libro suele considerarse trivial, ya que se trata de repetir algo que ya se ha hecho. Sin embargo, esta acción aporta muchos beneficios a nuestro cerebro y a nuestro corazón.

Uno de los pasatiempos más populares entre la gente, especialmente los adultos, es la lectura. Leer un libro no sólo relaja la mente, además activa las emociones. Muchos lectores sueñan con alcanzar metas y ser protagonistas de grandes aventuras pasando las páginas de un buen libro.

Mucha gente ni siquiera se lo plantea, pero se equivoca. Cuando leemos un libro por primera vez, no entendemos el significado de todo lo que sucede. Por ello, una relectura puede ayudarnos a entender algo más, quizás algún comportamiento que a primera vista parecía poco importante, o algo que se nos haya pasado por alto.

Los beneficios de releer un libro

Pocas personas saben que releer un libro puede aportar numerosos beneficios. Se refieren tanto a nuestra mente, que conocerá algo más del significado de la historia, como a nuestro corazón, que captará mejor las emociones que el autor ha querido transmitir. Estas son las ventajas

Entrenamiento de la memoria

Repetir la lectura de un libro es una forma muy útil de entrenar la memoria. La concentración se dispara en aquellas partes del libro a las que no prestamos atención al principio. Algunos estudios afirman que un libro debería leerse siempre más de una vez, ya que podemos aprender algunas lecciones más de él.

Ahondar en el significado

Cuando lees un libro por primera vez, te sumerges en algo desconocido. No sabemos nada sobre los personajes, la trama y cómo terminará la historia. La segunda vez es diferente: conocemos el tema y su desarrollo, pero también entendemos el significado de palabras o frases que antes habíamos subestimado.

Recuerdos

Cuando se relee un libro, es inevitable que los recuerdos vengan a la mente. No sólo hablamos de lo que leemos, sino también de todo lo que imaginamos durante la primera lectura. Además, los personajes son casi como conocidos que volvemos a ver después de mucho tiempo.

Experimentar nuevas emociones

Incluso en un libro que ya hemos leído podemos encontrar nuevas emociones. Si volvemos a leerlo después de mucho tiempo, es casi seguro que la historia y los personajes despertarán sentimientos diferentes a los de antes. De esta manera también podemos analizar mejor los cambios que hemos sufrido.

Concentrarse mejor

Leer un libro por primera vez puede ser sinónimo de pasar las páginas a toda prisa. Esto se debe a que tenemos curiosidad por conocer lo que sucederá con cada trama, pero sobre todo el final de la historia. La segunda vez no será así: conocido ya el desenlace se producirá una lectura más intensa y profunda; además, seguramente podremos fijarnos en algunos detalles que pasaron desapercibidos la primera vez.